Ignacio Varchausky: "el tango es una de las formas más extraordinarias de celebración, reflexión y reconstrucción de nuestra identidad"
30 de marzo de 2019

Orientado al público general, Los estilos fundamentales del tango es un viaje al corazón de las orquestas típicas desde una perspectiva original, en la cual los secretos de los estilos orquestales del tango son revelados en un lenguaje claro y accesible para todos. Lleno de buena información y libre de toda solemnidad, cada encuentro es la posibilidad de acercarnos más al tango, aprender a escucharlo mejor y así disfrutarlo cada vez más.
-En grandes rasgos, ¿cuáles podría afirmarse que son los estilos fundamentales del tango?
-Cuando hablamos de los estilos orquestales del tango, hay una doble matriz que tiene a las orquestas de Francisco Canaro y Julio De Caro como puntos de partida hacia el desarrollo del género. De esas dos grandes corrientes -la primera más aferrada a fórmulas netamente bailables y la segunda consagrada al desarrollo musical del tango- surgen una cantidad de estilos que resumen las vastísimas posibilidades estéticas que tiene el tango orquestal. Entendemos como "estilos fundamentales" a los estilos que desarrollaron las orquestas de Carlos Di Sarli, Aníbal Troilo, Juan D'Arienzo, Osvaldo Pugliese, Osvaldo Fresedo, Alfredo Gobbi, Horacio Salgán y Astor Piazzolla. Todas orquestas que lograron definir un discurso propio y reconocible que las recorta del resto, y si sumamos sus característica podemos hacer un compendio bastante completo del lenguaje orquestal del género. A medida que se abre el juego aparecen otras maravillas como los estilos de Pedro Laurenz, Francini-Pontier, Osmar Maderna, José Basso y Fulvio Salamanca por nombrar algunos.
-¿Con qué se van a encontrar quienes concurran al seminario en el Cultural Alfonsina Storni?
-Se van a encontrar con muchísima información presentada de una manera amigable y comprensible para el público general, no hace falta tener conocimientos musicales previos para participar del seminario, compartir música y disfrutarla. Cada encuentro está dedicado exclusivamente a un estilo, el cual es atomizado y analizado en cada uno de los detalles musicales y estilísticos que lo hacen único. Yo voy explicando e ilustrando poco a poco cada uno de estos elementos utilizando fragmentos de grabaciones históricas, siempre vamos de lo general a lo particular, separamos las capas de información musical y nos tomamos todo el tiempo necesario para que los conceptos se entiendan. La idea es que el público se vaya con dos orejas nuevas.
-¿Cómo fue que te comenzó a interesar el tango y los mundos que lo rodean?
-Todo comenzó con un cassette de Ignacio Corsini que mi papá Jorge nos mostró a mí y a mi hermano Nicolás. Nos dijo: "Escuchen esto que está re de onda en los bailes de los chicos de sus edad". Yo tenía 11 años y aquel chiste me cambió la vida. Me fanaticé con Corsini y a partir de allí empecé a indagar más en la discoteca familiar. De a poco fui escuchando grabaciones de De Caro, Pugliese, Piazzolla, Salgán, D'Agostino y otros que había en casa hasta que un día esos discos no fueron suficientes y empecé a comprar mis propios vinilos de tango. El camino de los discos es una locura hermosa, esa fue mi puerta de entrada al tango, pero no pasó mucho tiempo hasta que empecé a llamar a coleccionistas y a viejos maestros para conocerlos, hacerles preguntas y ampliar mi mirada y conocimiento sobre el tango. Agarraba la guía telefónica y arrancaba… “Hola, maestro Hugo Baralis?, me gustaría conocerlo”… y así fui conociendo a muchos personajes increíbles que me enseñaron muchísimo y me compartieron su mirada, su lógica y la mística que hay detrás de esta música.
-Tomando como base que los diversos estilos fueron enriqueciendo y haciendo más grande al tango, ¿cuál o cuáles con los estilos que más te gustan?
-Obviamente me gustan muchísimas orquestas, con Troilo, Salgán, Pugliese y Di Sarli a la cabeza. Pero mi estilo favorito es el de Alfredo Gobbi, allí está todo, es la gran enciclopedia del tango. Escuchando a Gobbi escuchás a Fresedo, Di Sarli, Troilo, Pugliese… es el gran compendio del lenguaje orquestal tanguero. Con apenas 82 grabaciones logró resumir un universo infinito. Como dijo alguna vez Horacio Salgán: “Cada vez que escucho un disco de la orquesta de Gobbi descubro algo distinto, como una magia, como suelta una flor su fragancia. Siempre me asombra”.
-Dicen por ahí que "el tango te espera" ¿Es así?
-Si bien es una frase hecha y algo remanida, hay que decir que tienen mucho de cierto. El tango es una cultura vasta, compleja, que tiene de todo adentro. Lo feo que tiene espanta, y lo lindo que tiene puede intimidar. Tanto su música como su poesía y baile son muy elaborados y eventualmente sofisticados, de corte y naturaleza popular, pero con mucho para captar y procesar. Es como un gusto adquirido, para apreciarlo y disfrutarlo hay que lograr cierta familiaridad, y muchas veces eso llega con el tiempo. A la vez, pienso que hay un factor relacionado con la identidad que siempre está latente, y aunque no se exprese tempranamente eventualmente sale a la superficie, el tango nos ayuda a entender un poco mejor quiénes somos.
-Hace un tiempo te metiste de lleno en la obra de Alfredo Gobbi ¿Qué descubriste de éste enorme compositor durante la investigación?
-Descubrí que su mirada conceptual del tango es de una fineza profunda e infinita. La construcción de su discurso musical y estilístico está plagado de ínfimos detalles, inaudibles para el oído desprevenido, pero claros y bellos para quien se compromete con su lírica. Uno escucha una y otra vez sus grabaciones y la experiencia jamás es la misma. Hay obras muy poco conocidas como “Cavilando” o “Viejo madrigal” que encierran una poética tanguera tan delicada como frecuente. Revisé muchísimo material gráfico de época que da cuenta del respeto de sus pares y una intermitente pero sólida centralidad en la escena tanguera de los años ’40 y 50. Leyendo aquellas publicaciones –mayormente revistas de mi colección personal- también se adivina cierta tristeza inherente a la personalidad de Gobbi y se explica su conocida dificultad para sostener su propio proyecto en el plano profesional y comercial. Es el antihéroe perfecto del tango.
Dijo Héctor Larrea: “Ignacio nos explica -con mucha naturalidad- de qué se trata la orquesta típica, qué es lo que tiene adentro. Porque lo que nunca se ha podido llegar a establecer es qué hay dentro de eso, que es justamente lo más lindo: todo lo que hace un director para establecer un estilo. Ya se sabe que el estilo perfora al género y los estilos han engrandecido al tango”.
-El Arranque está celebrando sus 20 años como formación ¿Qué camino lleva recorrido y qué se proponen mirando hacia adelante?
-El camino recorrido aún me resulta increíble. Hemos hecho cosas que jamás imaginé que podían suceder y que en perspectiva aún me sorprenden. Recorrimos el mundo tocando la música que nos gusta, grabamos una decena de discos que pudimos presentar en conciertos, festivales y espectáculos en lugares tan importantes y disimiles que ni nosotros mismos podíamos soñar. Tocamos con muchos de nuestros ídolos, grabamos con Nelly Omar, Leopoldo Federico, Julio Pane, Raúl Garello y Víctor Lavallén entre muchos otros grandes tangueros, y también hemos hecho muchos cruces interesantes con grandes artistas de otros géneros como Wynton Marsalis, Leo Masliah, Fernando Cabrera, Kevin Johansen y Lucas Martí… hoy lo pienso y me parece ciencia ficción. Lo que se viene es la presentación del disco que grabamos con Lavallén, se va a llamar “Camaradas” y es una celebración de la música de Emilio Balcarce y Julián Plaza, que fueron los dos grandes compañeros de Víctor en la orquesta de Pugliese y el Sexteto Tango y a la vez fueron dos de nuestros grandes mentores. El próximo sábado 27 de abril haremos un concierto en el Tasso adelantando el repertorio del disco.
-¿Cómo definís al tango en tu propio diccionario?
-Entiendo al tango como una de las formas más extraordinarias de celebración, reflexión y reconstrucción de nuestra identidad.
Seminario Los estilos fundamentales del tango
Dictado por Ignacio Varchausky
Lunes 1 de abril, 19 horas
Centro Cultural Alfonsina Storni, Tucumán 3233, Abasto
Primer lunes de cada mes hasta octubre inclusive
Entrada libre y gratuita
Vuelve el seminario Los estilos fundamentales del tango dictado por el músico, productor y divulgador Ignacio Varchausky. El primer encuentro de esta quinta temporada será el lunes 1 de abril a las 19hs, en el Centro Cultural Alfonsina Storni (Tucumán 3233, Barrio del Abasto). La cita se repetirá el primer lunes de cada mes hasta octubre inclusive. Este seminario está organizado por el programa de tango de la Dirección de Promoción Cultural del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires y es con entrada libre y gratuita.